*Narra Ashley*
Seguía mirando al chico con el que me había chocado segundos
antes. El estaba sonriendo con una de las sonrisas más bonitas que he visto
nunca pero de un segundo a otro su cara cambio totalmente, se puso serio y
retiró la mano que me estaba ofreciendo para levantarme, lo miré extrañada no sabía
el motivo de su cambio.
-XXX: Vamos levántate, ya vamos tarde por tu torpeza.
Vale, me desilusioné, creía que era un chico especial pero
en el momento que abrió su gran bocaza me pareció que era un completo idiota.
Suspiré, no tenía sentido desilusionarse por esa tontería no sé porque le
estaba dando tantos vueltas. Me levanté, ya llevaba demasiado tiempo en el
suelo, recogí mi mochila la llevaba abierta de haber sacado el horario así que
se salieron algunas libretas. Las guarde rápidamente y mire al chico que no
hacía absolutamente nada.
-Yo: ¿Piensas hacer algo o te vas a quedar todo el día ahí
plantado?- dije cruzándome de brazos
-XXX: Oh perdona, debería tirarme encima de la gente para
entretenerme un rato – me sonrió irónicamente- a ti te funciona, aunque está
muy mal para una chica ir abalanzándose sobre el primer chico guapo que ve.
-Yo: -mi boca no podía estar más abierta- Haber chulito,
menos humos que prefiero estamparme en la pared antes que contigo.
Iba a contestarme pero apareció un hombre trajeado que nos
dijo que nos fuéramos a clase ya que
íbamos tarde. No quería perder el tiempo más con él así que me giré sin decir
nada y abrí la puerta para entrar en la clase que me tocaba.
-Profesor: ¿Se puede saber por qué llegáis tarde el primer
día? Pasad, no os lo tendré en cuenta esta vez pero no da muy buena impresión
de vosotros
Espera un segundo, ¿ha dicho vosotros? Miré atrás y me lo
encontré apoyado en el marco de la puerta con esa sonrisa… y me miraba
cómicamente, seguramente le estará pareciendo divertida mi cara por llegar
tarde, bueno está en mi misma clase pero puedo evitarlo, lo intentaré ignorar
-Profesor: Habéis llegado los últimos así que solo quedan
libres los dos asientos del final
Genial, ahora encima tendría que sentarme al lado del
chulillo. En la clase todos nos estaban mirando y me fijé en que también estaba
el chico rubio que salvó a Alice, luego me reiría de ella por eso. Me dirigí a
mi asiento con paso firme y me senté al que estaba pegado a la ventana. Me
agobiaba los espacios cerrados con tanta gente y la ventana ayudaba a que
estuviera más cómoda. Él se disculpó con el profesor por llegar tarde y se
sentó a mi lado. No le miré no me apetecía montar ningún lío ahora, el profesor
estuvo explicando de que iba su clase y como nos iba a calificar. La clase era
de francés, no era mi idioma favorito pero lo sobrellevaba
-Profesor: Y lo más importante de todo, habrá que hacer un
trabajo para fin de curso que lo haréis por parejas según estáis sentados, este
trabajo contará un 40% de la nota final y tratara sobre las ciudades más
importantes de Francia, estáis obligados a hacerlo si no queréis suspender. Os
dejo tiempo para que habléis y os organicéis.
Me di cuenta de que el chico se giro hacia mí.
-XXX: Bueno compañera, parece que nos vamos a ver más de lo
que nos gustaría- rió.
-Yo: Créeme que a mí me hace la misma gracia que a ti.
-XXX: Oh, este trabajo va a ser interesante me alegro de ser
tu compañero. Bueno para empezar ¿Me dices tu nombre?
-Yo: Soy Ashley ¿Y tú eres?
-XXX: Zayn, y deberías darme tu número de teléfono si vamos
a tener que quedar para hacer el trabajo.
Nos dimos los números y el timbré sonó
-Zayn: Bueno ya la próxima vez que me veas me puedes saludar
sin necesidad de tirarte a por mí.
-Yo: Tranquilo que no me pienso acercar a ti a menos de dos
metros vaya que se me pegue algo.
Reí, vale Zayn era muy creído y me ponía de los nervios pero
también estaba cómoda con él y me reía un montón aunque eso no se lo iba a
decir nunca. Recogí mis cosas y me dirigí al lugar en donde había quedado con
las chicas.
*Narra Amber*
Me dirigí a mi clase, no iba con ninguna de mis amigas pero
ya me las ingeniaría, entré, la clase estaba ya casi llena, no sabía donde
sentarme pero vi como una chica rubia me miraba y me sonreía, le sonreí y me
dirigí hacia ella
-Yo: Hola soy Amber ¿Qué tal? – bueno se notaba que las
presentaciones no eran lo mío, nunca sabía que decir pero esta chica me sonrió.
-Chica: Hola Amber, soy Debby ¿Eres nueva verdad? – Asentí
– Seguro que no debes de conocer a mucha gente ¿Quieres sentarte aquí?-
dijo señalando el asiento que tenía a su lado
-Yo: Vale gracias – me senté a su lado y estuvimos hablando
todo el rato hasta que llegó el profesor. Era una chica simpática, se las
presentaría luego a las demás.
El resto de la clase estuve atendiendo al profesor, aunque
tampoco decía mucho porque era el primer día y te cuentan siempre el mismo
discurso. Al sonar el timbré me quedé hablando con Debby un rato, le hablé de
mis amigas y que se las tenía que presentar
-Debby: Oye por cierto este fin de semana voy a dar una
fiesta de disfraces en mi casa ¿Por qué no te vienes con tus amigas?- me quedé
algo indecisa.
-Yo: No lo sé, aun no conocemos mucha gente y no estoy
segura si encajaremos.
-Debby: No digas eso tonta, tu ven que te aseguro que te lo
vas a pasar genial.
-Yo: - sonreí – Vale iremos, tampoco tenemos nada que perder.
-Debby: Pues genial entonces, diles a tus amigas que se vayan preparando y que vayan buscando unos disfraces porque va
a estar genial la fiesta – dijo con los brazos en alto lo que provocó mi risa.
-Yo: Anda vente y ya se lo dices tú misma en persona.
Fuimos a donde estaban las chicas, todas menos Ashley que
aun no había llegado. Le presenté a Debby, parece que les cayó bien a todos y
estuvimos contando un poco como había sido nuestra primera hora, en ese momento
apareció Ashley saludándonos le presenté a Debby también y ella les dijo lo de
la fiesta de disfraces. A todas les pareció bien en especial a Eli que estaba
loca por irse de fiesta de una vez, le pregunte a Ashley que como había sido su
primera hora y dijo que ya nos contaría que no le apetecía hablar de eso ahora.
-Debby: bueno chicas ahora es la hora del comedor, las mesas
están todas pilladas pero yo siempre me siento con mi vecino y sus amigos así
que os podéis venir conmigo a esa mesa.
-Ashley: pues ¿a que esperamos?
*Narra Ashley*
Seguimos a Debby por el instituto hasta llegar a la
cafetería, tenía razón estaba llenísima y no había ni un solo sitio libre ella
empezó a esquivar a gente y la seguimos, supongo que conocía donde estaba la
mesa de repente se paró en seco, sonrió y saludó, seguí la dirección de su
mirada y me encontré con un chico de pelo castaño al igual que sus ojos que la
saludaba igualmente me fije en sus acompañantes, estaba el chico rubio que
salvo a Alice, la miré, se la notaba nerviosa y se acababa de sentar alguien
más con ellos pero no lo veía porque había gente delante, Debby avanzó y justo
cuanto estaba al lado de la mesa lo vi
-Yo: No puede ser – suspiré
En ese momento Zayn levantó la cabeza de su plato para
mirarme.
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